Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente
Explicación
Este refrán popular nos advierte de manera pintoresca acerca de la importancia de estar siempre alerta y activos. En su forma más sencilla, compara a alguien que no presta atención o no actúa con rapidez, con un camarón en el fondo del río que, al quedarse dormido, es arrastrado por la corriente. La corriente representa aquí las consecuencias naturales o las circunstancias que, de no manejarlas adecuadamente, podrían llevarnos por caminos indeseados o situaciones adversas. Es una llamada a no bajar la guardia y a estar siempre preparados para actuar, haciendo énfasis en la proactividad y la atención como claves para no ser ‘arrastrados’ por los eventos de la vida.