El que no arriesga no gana
Explicación
Este conocido dicho nos recuerda que, para obtener grandes recompensas, a veces es necesario tomar riesgos. Si siempre jugamos a lo seguro y no salimos de nuestra zona de confort, es probable que nunca experimentemos esas grandes victorias en la vida. Es una verdad universal; desde los negocios *hasta* las relaciones personales, **arriesgar** puede ser el camino hacia *algo* realmente significativo y gratificante.