Explicación
Lo que Pablo Picasso, una figura predominante en las artes visuales del siglo XX, intenta expresar con esta frase es la capacidad única del arte para capturar y transmitir verdades emocionales y universales a través de la distorsión y la exageración de la realidad. Nos propone una reflexión sobre cómo el arte, aún siendo una creación alejada de la replicación exacta de la naturaleza, logra revelar dimensiones profundas del ser humano y sus vivencias que de otro modo podrían permanecer ocultas. Este enfoque abstracto e interpretativo es característico del estilo de Picasso, especialmente visible en su contribución al cubismo, donde exploró la multiplicidad de perspectivas y la fragmentación para llegar a una comprensión más profunda de la esencia de los objetos.