La suerte de la fea, la bonita la desea.
Explicación
Este refrán tan popular en muchos países de habla hispana nos brinda una enseñanza que va más allá de la simple apariencia física. *Aunque a primera vista podría parecer que se habla únicamente de belleza*, lo que realmente se está considerando aquí es cómo la percepción y el deseo van de la mano. A veces, se tiende a pensar que las personas con una apariencia menos atractiva pueden tener una vida menos criticada o más sencilla porque no tienen que lidiar con ciertos prejuicios que se asocian con la belleza.
Pero ojo, **la frase es más profunda que eso**. Nos recuerda que *muchas veces en la vida, las personas hermosas desean esa suerte que tienen las no tan agraciadas*. Puede ser la tranquilidad, la falta de presión por ser siempre perfectas, o incluso la simplicidad de ser aceptadas y queridas por quienes son, no solo por su aspecto físico.
Así que la próxima vez que critiques tu reflejo en el espejo o envidies la apariencia de otra persona, recuerda lo que dice este refrán. La verdadera suerte y felicidad no dependen solo de lo externo, sino de cómo vivimos nuestra vida y cómo somos percibidos y amados por los demás.